Igual eres de los que piensas que si limpias una superficie o zona ya está desinfectada. Lo cierto es que no, la limpieza es un paso previo y anterior a la desinfección, ya que los gérmenes pueden esconderse entre la suciedad y la mugre. Conocer la diferencia entre limpiar y desinfectar es importante por varios motivos, por ejemplo, no es necesario hacer siempre las dos cosas.
Otra razón es que cada proceso necesita de productos diferentes, por lo que es importante entender y seguir los pasos correctos en cada proceso, sobre todo, a la hora de desinfectar.
Por este motivo, en este artículo os explicamos todo lo que necesitas saber sobre la limpieza y la desinfección, así como lo que tienes qué hacer en cada caso.
¿Cuál es la diferencia entre limpiar y desinfectar?
Limpiar y desinfectar suelen utilizarse indistintamente, pero en realidad son dos cosas distintas.
- Limpiar consiste en eliminar la suciedad, las impurezas y los gérmenes de las superficies. Este proceso no elimina por completo los gérmenes, pero reduce el número y el riesgo de propagación de cualquier patógeno o virus.
- Desinfectar, en cambio, se refiere a matar los microorganismos nocivos e impedir su crecimiento y desarrollo. Este proceso no limpia necesariamente las superficies sucias, pero al destruir los gérmenes reduce significativamente el riesgo de propagar enfermedades e infecciones.
Conocer la diferencia entre ambos conceptos es clave para protegerte a ti, a tu familia y a tu entorno de posibles infecciones.
Limpiar suele hacerse más a menudo, de hecho, lo normal es que se realice un par de días a la semana, sino todos los días.
Por otro lado, a la hora de desinfectar se hace menos veces, en especial, en zonas con alto riesgo de contaminación.
Saber cuándo y cómo desinfectar correctamente las superficies es crucial para crear un entorno seguro y saludable.
A continuación, te lo contamos en profundidad.
¿Cuándo y cómo realizar cada tarea?
Hay varias formas de limpiar y desinfectar correctamente las superficies y es importante seguir el protocolo adecuado en cada caso. Piensa en la diferencia entre limpiar y desinfectar. La limpieza es el primer paso para mantener un hogar saludable por lo que comenzamos por ella y luego seguimos con la desinfección.
Aquí hay algunos consejos para limpiar correctamente tu hogar:
- A la hora de limpiar es conveniente que conozcas todos los tipos de suciedad que existen para acabar con la grasa, restos y cualquier residuo que te puedas encontrar.
- Al saber cómo eliminar los restos es más fácil escoger los productos más adecuados para cada superficie. Por ejemplo, para los suelos y azulejos puedes usar un limpiador específico para estas superficies.
- Ten en cuenta el tipo de superficie y usa un producto específico. Si el suelo es de parque o tarima opta por un producto para la madera. Si es una superficie porosa como mármol ni se te ocurra usar un producto que no esté preparado para suelos tipo gres o el mármol que son porosos.
- Baño y cocina: estas dos habitaciones son las que más fácilmente se ensucian, por lo que debemos prestarles una mayor atención y mantenimiento. Para mejorar la limpieza tanto en la cocina como en el baño te recomendamos que leas el anterior enlace.
- Sigue las instrucciones del fabricante a la hora de usar cada producto. Protege tus manos y usa guantes de limpieza.
- Evita usar químicos y limpia las superficies con agua y jabón. Usa una esponja o un paño limpio para aclarar las superficies. Finalmente, seca aquellas que no se puedan ventilar con un trapo de microfibra limpio.
Trucos para una desinfección completa
La desinfección es el segundo paso para mantener un hogar saludable. Después de limpiar las superficies, es importante desinfectarlas para matar los gérmenes y las bacterias.
Puede ser un proceso largo, pero es importante asegurarse de que así eliminas todos los virus y bacterias.
Para realizar una desinfección completa en tu hogar ten en cuenta los siguientes consejos:
- Prepara los productos. Para ello, tienes varias opciones: un desinfectante y limpiador universal capaz tanto de limpiar como de desinfectar sin dañar las superficies. Otra opción es recurrir a un producto más específico como un desengrasante si la suciedad está muy incrustada.
- Ten mayor cuidado con el baño y la cocina. Como pasa con la limpieza estas habitaciones se ensucian enseguida. Si quieres desinfectar en ambos lugares, no te puedes olvidar de limpiar el inodoro, el fregadero y para darle el toque final, no te olvides de las cañerías y desagües. La mayor parte de los olores salen por ahí, por lo que si limpias los sumideros tendrás un mejor olor en casa durante más tiempo.
- Evita los productos químicos, tóxicos y potentes como la lejía y las soluciones a base de alcohol. Tienes opciones ecológicas y potentes para matar virus, pero deben utilizarse siguiendo las instrucciones del fabricante. Si tienes dudas en nuestra tienda online puedes escoger con seguridad el artículo que necesites, todos nuestros productos son respetuosos con el medio ambiente.
- Respeta las instrucciones del fabricante para el tiempo de contacto y la dilución de cada producto. Aplica el desinfectante en las superficies y déjalo actuar durante el tiempo recomendado.
- Finalmente, aclara y limpia las superficies con un paño limpio después de que el desinfectante haya hecho efecto.
Recomendaciones finales
Recuerda, la limpieza y la desinfección se parecen, pero son dos cosas diferentes. La limpieza elimina la suciedad y los residuos, mientras que la desinfección mata los gérmenes y las bacterias. Ambos pasos son esenciales para mantener un hogar saludable.
A mayores, te resumimos los puntos que consideramos más importantes:
Antes de aplicar cualquier producto de limpieza o desinfección, asegúrate de leer las instrucciones de la etiqueta y ponte guantes de goma u otra ropa protectora para evitar cualquier contacto del producto con la piel o los ojos.
Escoge un producto para cada tipo de superficie. Presta mayor atención a la cocina y el baño. Desinfecta estas superficies más a menudo que el resto de la casa, en especial, el inodoro y el fregadero.
Con el resto de superficies y suelos de la casa basta fregar de vez en cuando. Una vez a la semana puede ser suficiente si no están muy sucios.
Después de limpiar cada superficie, aplica el producto desinfectante con un paño desechable y déjalo reposar el tiempo recomendado según las instrucciones de la etiqueta, que suele ser entre 10 y 30 minutos. Una vez finalizado el proceso de limpieza y desinfección, desecha el paño y listo.
En definitiva, la limpieza y la desinfección son esenciales para mantener un hogar saludable y seguro y con estos consejos finales acabamos este artículo.
Esperamos que hayas aprendido cuál es la diferencia entre limpiar y desinfectar y pongas estas recomendaciones en práctica.