¿Sabías que la elección del agua influye en la limpieza y el mantenimiento de aparatos electrónicos como el lavaplatos? Incluso el agua que fluye de nuestros grifos y bebemos a diario desempeña un papel crucial. Las aguas duras y blandas, términos que a menudo pasan desapercibidos, tienen un impacto significativo en la eficacia de los productos de limpieza que utilizamos a diario.
En este post, desentrañaremos los misterios detrás de estas aguas y os contaremos todo lo que necesitáis al respecto para elegir el producto de limpieza adecuado para cada tipo. Además, sabréis algunos trucos para limpiar la cocina, el lavaplatos y el fregadero para que quede limpio y brillante durante mucho tiempo.
Las aguas duras y blandas se distinguen por su contenido mineral, especialmente de calcio y magnesio. Las aguas duras contienen niveles más altos de estos minerales, mientras que las aguas blandas tienen niveles más bajos.
En zonas con aguas duras, se requiere un mayor consumo de jabón para el lavado de la vajilla, ya que la capacidad de generar espuma queda limitada. Además, las aguas duras son más propensas a generar grandes cantidades de cal, lo que puede afectar la calidad de los lavados y acortar la vida útil de los electrodomésticos.
Esta diferencia tiene un impacto significativo en la eficacia de los productos de limpieza y puede afectar la apariencia y durabilidad de las superficies limpias.
Las zonas de agua dura y blanda varían según la geología y las características del suelo. En España, las zonas sur y de la costa del levante son conocidas por tener aguas duras, con una mayor dureza en áreas como Alicante, Palma de Mallorca, Málaga, Jaén y Almería.
Por otro lado, las zonas del noroeste español, como Galicia, la zona del Pirineo y Madrid, son conocidas por tener aguas más blandas.
La calidad del agua en nuestro país está directamente relacionada con la zona de la que proviene, lo que influye en la dureza del agua en diferentes regiones del Estado.
Las aguas duras tienden a formar depósitos minerales, como la cal, en las superficies con las que entran en contacto. Estos depósitos pueden dejar manchas difíciles de eliminar en habitaciones como cocina y baño; en especial, en vidrios, azulejos, grifos y electrodomésticos.
Además, la presencia de minerales puede reducir la eficacia de los detergentes y desinfectantes, lo que requiere el uso de cantidades mayores de productos de limpieza para lograr resultados satisfactorios.
Por otro lado, las aguas blandas son más propicias para la limpieza eficaz. Al tener niveles más bajos de minerales, las aguas blandas reducen la formación de depósitos minerales y permiten que los productos de limpieza funcionen de manera óptima.
Esto puede resultar en una limpieza más rápida y eficiente, así como en un menor uso de productos químicos agresivos. Afortunadamente, es posible optar por productos de limpieza sostenibles y respetuosos con el medio ambiente como los tensioactivos.
Cuando se trata de elegir un producto de limpieza para aguas duras o blandas, es importante considerar varios factores:
Con estos consejos, diferencias y consejos sobre los productos de limpieza para aguas duras y blandas esperamos haberos aclarado todo al respecto, y así podáis elegir un artículo desinfectante a medida.
Finalmente, si dudáis o no sabéis qué productos o artículos o productos de limpieza del hogar usar o no, no dejéis de escribirnos vuestras dudas y poneros en contacto con nosotros en este enlace. Desde Viks estaremos encantados de contestar todas vuestras preguntas para que podáis escoger aquellos artículos que se adapten a vuestras necesidades.
¿Te has preguntado alguna vez cómo funcionan los productos de limpieza que usas a diario…
cómo desatascar un fregadero
¿Sabías que si arañas un cristal, en la mayoría de los casos, puedes repararlo? En…
¿Sabías que si no tienes cuidado con la cal y no la retiras o limpias…
Además de la limpiar cristales de forma periódica, es importante realizar un mantenimiento regular de…
¿Quieres saber qué es cómo se cuida una bomba de recirculación de agua? Te lo…