A la hora de limpiar tu coche, no hay parte que requiera más atención que las llantas. Su aspecto brillante no sólo hace que tu coche parezca nuevo, sino que también puede afectar a la seguridad. Por ejemplo, la suciedad de las llantas se puede colar en los frenos y afectar a la frenada. Pero, ¿cómo limpiar las llantas del coche sin arañarlas ni quitarles brillo o dañarlas?
En este artículo hemos preparado una guía en la que te contamos todo lo que necesitas saber para limpiar una de las partes del coche que más se ensucian junto a las ruedas.
A la hora de mantener limpias y relucientes las llantas del coche lo primero que debes probar es el típico método de agua a presión.
Eso sí, ten en cuenta varias cosas:
El problema de estos métodos (esponja, agua a presión o limpieza manual) es que no quitan toda la suciedad que se acumula en el interior de las llantas.
Piénsalo bien, las ruedas junto a las llantas son uno de los elementos que más expuestos están a los agentes externos (agua, lluvia, grava y barro, entre otros) derivados del asfalto. El mero hecho de salir de casa y mover el coche 5 minutos por la ciudad, aunque sea a 30 kilómetros por hora, lleva a acumular suciedad y grasa en el interior de las llantas.
Precisamente, la acumulación de grasa, aceite y polvo hacen que sea tan difícil de erradicar este tipo de suciedad de las llantas.
El problema es que este tipo de suciedad no se cuela solo en el interior, también en el interior. Y al no verse parecen que están limpias cuando en realidad no lo están. Entonces, ¿cuál es la mejor forma para limpiar las llantas?
Fácil, lo primero que necesitas para quitar la suciedad de las llantas es usar un producto específico como un limpiador de llantas. Lo segundo es emplear correctamente el producto tanto por el interior como el exterior.
Para ello, lo puedes hacer de varias formas:
Una vez sabes cuál es el mejor método para limpiar las llantas, te vamos a dar las claves para un mantenimiento preventivo.
Limpiar los neumáticos de tu coche es una parte importante del mantenimiento del vehículo. No sólo hace que tu vehículo tenga mejor aspecto, sino que también ayuda a evitar que se acumulen contaminantes peligrosos en la cubierta exterior.
El problema es que la suciedad que se acumula es una mezcla de aceite, grasa y polvo que puede ser difícil de quitar de la llanta. De hecho, por mucho que se frote estas manchas no salen y mucha gente acaba deteriorando las ruedas y las llantas por frotar demasiado.
Un buen mantenimiento preventivo de las ruedas evita la acumulación del aceite en el exterior e interior de los neumáticos y las llantas. ¡Si no quieres acordarte de lo mucho que cuesta retirar la suciedad más gorda limpia las llantas sucias con agua a presión al menos una vez al mes.
Además de mantener limpios los neumáticos, hay otros consejos clave que pueden ayudar a reducir la contaminación de los mismos y mejorar su eficiencia y durabilidad.
Las ruedas son como el calzado de las personas. ¡A mayor calidad de las ruedas, más comodidad y menos problemas!
Por último, mantén el coche encerado y libre de suciedad y otros residuos. Siguiendo estos sencillos consejos, puedes mantener tus neumáticos libres de contaminación y ayudar a mantener la calzada de tu coche segura y limpia.
Para quitar la suciedad más profunda no hay nada más efectivo que usar el producto adecuado. En el caso de las ruedas debemos diferenciar dos apartados: las ruedas y las llantas.
¿Cómo limpiar los neumáticos? Si quieres tener unas gomas limpias, protegidas y que te duren mucho tiempo no hay nada más efectivo que un abrillantador de ruedas y neumáticos. Un buen abrillantador de ruedas es aquel que conserva las propiedades del caucho, crea una capa protectora e hidrata y recupera el brillo del caucho.
Su forma de aplicación es muy fácil de usar. Basta con aplicar directamente. En el caso de que la rueda esté muy sucia y tenga barro incrustado o grasa es mejor aclarar primero con agua y jabón. Otra opción es usar una manguera con agua a presión a una temperatura media. Después bastaría echar el producto y dejar actuar.
Para limpiar las llantas debes seguir los consejos que te indicamos en el primer apartado, aunque para ello vas a necesitar un producto especial. Lo más indicado es un enérgico limpiador para superficies difíciles como es el interior de las llantas. En este caso, no hay nada mejor que un limpiador para llantas capaz de retirar la grasa y suciedad más arraigada.
El modo de empleo es sencillo. Basta con pulverizar el producto sobre el metal y dejar actuar. Al cabo de un minuto basta pasar un trapo de microfibra y retirar la suciedad. Presta atención a las ranuras y los radios interiores.
Si buscas aún más brillo, siempre puedes optar por un limpiador de llantas especial, como un limpiador de llantas por un lado y por otro lado, un abrillantador de neumáticos. Así, te asegurarás que las ruedas y las llantas queden como nuevos.
Este producto contiene una composición suave que corta la grasa y la suciedad, por lo que es una forma eficaz de eliminar las manchas difíciles de las ruedas. Eso sí, sigue atentamente las instrucciones del producto y evita usar productos tóxicos cerca de la pintura del coche.
Con estos consejos, podrás limpiar y abrillantar tus llantas como un profesional.
Siguiendo estos sencillos consejos, puedes mantener tus neumáticos libres de contaminación y ayudar a mantener las ruedas de tu coche seguras y limpias.
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